El verano ha terminado, las horas de luz disminuyen y las temperaturas se vuelven más duras.
Damos la bienvenida al otoño, la estación que suscita emociones contrastantes. Hay quien se emociona por la belleza de los nuevos colores que nos muestra la naturaleza y quien se deja llevar por la melancolía debido a los meses recién disfrutados y al frío de los que se avecinan.